jueves, 8 de octubre de 2009

DON RIGOBERTO (Extracto)


(...)
- No Fulvio. El mundo no funciona así. Este mundo está hecho para quienes quieren, los demás pasan...
- ¿Pasan?
- Pasan pues. O sea se van en caldo y de largo. ¿Nunca has querido algo con perseverancia?
- No
- Entonces no me entiendes...
- ... o sea sí, pero no don Rigoberto.
- Mmm, Fulvio me estás confundiendo.
- No, yo no. usted. Le decía que no he querido algo con perseverancia, pero a pesar de ello, si lo entiendo.
- O sea ¿Me entiendes que el mundo está hecho para los que quieren con perseverancia?
- No tanto así.
- Entonces...
- Entonces le creo y así logro entenderelo pero no lo entiendo plenamente; ya usted sabe que no viví esa clase de querer.
- Fulvio, me jodes la cabeza. ¿Por qué te haces tantas bolas?
- Yo no me las hago, usted me las atribuye.
- Bueno... pero como te decía mi buen Fulvio, este mundo está hecho así. Querer no es fácil pero se le pone empeño... y cuando no resulta entonces se hace procesión...
- ¡Ah! eso quiere decir que cargamos el anda y cantamos melodías religiosas entre inciensos, rezos y alabanzas ¿No?
- También; mas, en esencia, significa reflexionar ahí adentro, al costado del pulmón. A veces se crea presión entre el pecho y la garganta y otras veces la lengua queda con sabor a tristeza. Pero la conclusión es seguir adelante, por un camino distinto
- Ah, claro, como cuando llega la primavera...
- ... se guarda el invierno, porque si no, los verdes no se dejarían contemplar..."
(...)
Victucho