Luego de haber estado perdido durante meses entre cortesanos, tinterillos y académicos (y haber cargado los ánimos de malhumor, estrés y rebelión) me vuelvo a éste, mi lugar, para chillar como quico en contra del mundo vespertino y de otras babosadas más. Es que a veces ya no se puede tolerar las abruptas circunstancias de dolor que suelo observar (Como ésta en la que Japón le hizo combate futbolístico a los paraguayos, por mal ejemplo). Solo deseo hacerlos participes de mis ganas de escribir por bruto y por impotente (... de emociones, mas no del otro tipo). También quería compartirles que me siento mejor ahora que escribo indirectamente; me sirve de mucho, aún si sé que no me hago entender y que mi sintaxis es pésima (otra abrupta cirunstancia que duele observar). Por último, deseaba hacer una protesta: ¡Me urge el entendimeinto y la empatía! ... ¡Y me urge de usted! En lo demás, Argentina para campeón, mi tesis está en veremos, ya se acabaron los días vacunos y Don Rigoberto descansa en paz; sí, así es, ya lo términe y la terminé, pero aún está en etapa de corrección, que es casi lo mismo que volver a escribirla. Sin más, con nostalgia y preocupación, quedo yo de ti.
Victor
* Arte: Tomado de Interarte.com, patrocinado por Kerensa. Autor anónimo.